Se trata de ayudar a niños/as o adolescentes en desamparo, familias en riesgo, familias desestructuradas, inmigrantes… a recobrar la estabilidad, el equilibrio emocional, sensibilizar… familias que estén en un proceso de unificación, superar disputas entre sus miembros mediante dinámicas destinadas a la consecución de objetivos propuestos en consenso, entre el terapeuta y todos los miembros de la familia.
Debe ser regido por un educador social, psicólogo, pedagogo, trabajador social…